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| Dedicada a unos novios de Otoño |
En tus ojos brilla el sol que tanto anhelo,
Mirando a esta mujer y su aderezo
Esplende aquel recuerdo que me abriga.
Otoño, ¡Me encandilas!
Desvistes arboles, los pájaros emigran
El estío se rinde, los campos se atavían
Vagando en su belleza, entornas tu pupila.
Otoño, ¡Me encandilas!
Adviertes sus miradas y tiritas
Te abrumas por su amor mientras crepitas
Escuchas sus promesas y suspiras.
Otoño, ¡Me encandilas!
Otoño, ¡Me encandilas!
¡Pues mira,es una de mis estaciones favoritas! También me encandila.
ResponderEliminarBesitos
Es cierto, es una estación perfecta para encandilarse con la intensidad de sus colores, pero con un peligro enorme de invadirnos de melancolía.
ResponderEliminarVotaría porque me gustara tanto como tu poema.
Un beso